Así es la creación de fantásticas criaturas como el temible tiranosaurio que invadió las calles de Londres
Según lo sumergidos que estemos en las redes sociales, puede que estos días haya aparecido todo un Tyrannosaurus rex rugiendo en nuestra pantalla. Una bestia con una apariencia totalmente realista tanto a nivel de movimientos como de «piel» y demás elementos, fruto de lo que se ha evolucionado en los dinosaurios animatrónicos.
La animatrónica define las técnicas mediante las cuales se logra reproducir el comportamiento y el aspecto de seres vivos empleando mecanismos robóticos y/o electrónicos. Pueden no ser todo el animal o ser completo y quedar en una parte o fracción, pero suelen controlarse remotamente o programarse para aumentar esa sensación de realismo, y en el caso del dinosaurio que citamos lo consigue a un nivel superior (pese a que hay partes que lo delatan).
Son criaturas de «carne y hueso» (a su manera)
La BBC bromeaba desde su perfil de Facebook con el vídeo que acabó viralizándose: hablaban de «un nuevo empleado en la compañía» en referencia al T-Rex que asomaba por las oficinas de la cadena en Londres.
En el vídeo se aprecia bastante el realismo de la criatura artificial (aunque suene a oxímoron), pero en este otro vídeo de la misma escena (y algo más largo puede apreciarse algo mejor. Como decíamos al principio, no se trata sólo de emular los rasgos físicos del animal, sino de imitar (o en este caso tratar de emular) los movimientos del ser vivo, lo cual logran a un nivel de detalle que llega a los movimientos oculares y parpadeos del dinosaurio.
El T-Rey (el animatrónico, porque el «hijo» tiene más parte humana) es el que se creó para la exhibición «Jurassic World», siendo obra y milagro de la compañía Creature Technology. Una compañía dedicada a este mundo desde hace años (2006) y que, como muestran en su web, han llevado a cabo los animatrónicos tanto de éste como de otros espectáculos que traen a la realidad las criaturas del Jurásico, King Kong o algún dragón al que entrenar.
Sobre su crecimiento se habla en un reportaje que hizo Bloomberg (e incluimos a continuación), metiéndose literalmente en este taller tan particular. Explican que entre el personal encargado de «dar vida» a estas criaturas hay artistas especializados en efectos especiales en el cine, así como los desarrolladores y programadores que crean las rutinas de movimiento para las extremidades y las distintas partes de cada animatrónico.
Explicaba Sonny Tilders, co-fundador y director creativo de Creature Tecnology, que los animatrónicos son un organismo natural a nivel estructural al tener también (a su manera) huesos, músculos y piel. Resumía que la verdadera clave o truco es que todo esto trabaje junto, de modo que se logre el mayor realismo.
Los animatrónicos son un organismo natural a nivel estructural
El trabajo se ve parcialmente en el vídeo, donde vemos varias de estas criaturas y cómo se trabajan las distintas partes, desde ese «esqueleto» (hidráulico) hasta la «piel», compuesta por distintos tejidos. También se ve cómo son los mandos para controlar su movimiento de manera remota, los cuales son sistemas articulados con una estructura pareja a la del animatrónico en cuestión, de modo que al moverlos de una manera u otra el robot reproduce dicho movimiento a tiempo real, apoyados por algunos sistemas como joysticks.
Este mando, el Parasaurolophus que sale en el vídeo (al que el reportero acaricia) y algunos más se ven también en la sesión de fotografías de entre bambalinas que la compañía compartió sobre este espectáculo de dinosaurios. Y en este otro reportaje de Discovery UK logran mostrar y trasladar el trabajo que implica cada parte, tanto a nivel de piel y órganos como de mecánica y electrónica. En las articulaciones cada cilindro que une los «huesos» tiene su importancia y el trabajo para lograr el realismo de estructuras como la mandíbula es totalmente artesanal, limando y encajando cada diente.
En cuanto al software que permite crear esas rutinas de movimiento, se trata de C-Tech. Un software personalizado que incluye herramientas propias diseñadas para el control de los animatrónicos, con una interfaz personalizada que permite ajustar los ejes de los mismos de manera eficiente y con una serie de plug-ins que facilitan los distintos tipos de manejo, tanto directos como con automatización.
Decía Sonny de Creature Tecnology que se tarda aproximadamente un año en construir un dinosaurio animatrónico por todos esos detalles que hay que cuidar. Otro ejemplo de estas creaciones son al menos parte de los dinosaurios que se ven en la tercera parte de ‘Jurassic World’, la que según sus creadores es la película con más animatrónicos de toda la saga.
La fusión de animación y robótica
Una de las compañías que contribuyó al desarrollo de la animatrónica fue Disney, cuando en 1955 Walt y sus ingenieros pensaron en que los robots podrían formar parte de las atracciones de sus parques. De hecho, empezaron a denominarlos «audio-animatronics» (acuñándose el término a posteriori), y aquí hemos hablado en repetidas ocasiones de cómo están beneficiándose de avances tecnológicos como la inteligencia artificial o las ideas que parece estar teniendo la compañía (robots «abrazables»).
Así, no todo son efectos especiales y CGI en cuestión de dinosaurios y parece que queda mucho por ver, al menos en lo que respecta a estos referentes de los animatrónicos. El primer proyecto de Creature Tecnology fue un espectáculo llamado «Caminando entre dinosaurios», como la serie de la BBC, y posteriormente trabajaron en variedad de criaturas gigantes animadas, como un King Kong de tamaño real y otros animales, como las mascotas de los Juegos Olímpicos.
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Anna Martí
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